EL GATO DE MI PADRE


Empezaré diciendo que, qué yo sepa, mi padre no tuvo un gato, o por lo menos nunca supe de ello. Lo que voy a contar es acerca de un sueño que tuve y como suele suceder mientras soñamos, el asunto era “real” …

Soñé que era de madrugada y unos maullidos y ruidos hicieron que saliera al patio (de una casa –mi casa- pero innominada) y viera acurrucado debajo de la escalera a un gato, que atemorizado, me miraba; seguramente sus maullidos se debían a que repartidos sobre los peldaños de la escalera había otros gatos, a los que traté de espantar diciendo: “¡Fuera gato…! ¡Fuera…!”, y me miraron sin hacer caso, por lo que volví a tratar de espantarlos. No recuerdo si los gatos se fueron, porque supongo que el sueño cambió a otra cosa …

En la mañana siguiente, Alicia me dijo que –como mi papá- había estado tratando de –totalmente dormido- seguramente de espantar a un gato, a la voz de “¡Fuera gato…! ¡Fuera…!” y que era lo mismo que le había contado mi madre, hace muchos años, sobre mi padre y su reacción   –totalmente dormido- para espantar a un gato en su sueño, con las mismas palabras que yo usé …

¿Soñé el sueño de mi padre? Dicen que soñar con gatos significa prosperidad y dinero, también libertad … Ojalá así fuera, no por la “libertad” –porque creo ser libre y estarlo de problemas mayores- pero sí por el dinero, que siempre hace falta, y por la prosperidad, que se muestra huidiza …  Dicen también que “soñar no cuesta nada” y don Pedro Calderón de la Barca, afirma que “los sueños, sueños son” …

Imagen: https://genial.guru

Anuncio publicitario

NOTICIAS SOBRE DELINQUENTIA


“Delinquentia” es un país antiguo, donde –curiosamente- se hablan muchas lenguas, pero –también curiosamente y por desgracia- los habitantes se entienden entre ellos, y hacen todos más o menos lo mismo para vivir, para hacer dinero o simplemente por el placer de hacerlo …

“Delinquentia” tiene una capital que lleva el mismo nombre y dos grandes regiones o provincias. Una es “Criminalia” y la otra, “Asesinia”. La zona geográfica donde se asienta el país es “Corruptia”, con zonas de montaña, costa –bañada por el “Mare Podridus”-llamado así por las algas que se descomponen y la basura que arrastran las corrientes marinas-, y una selva impenetrable, de árboles gigantescos, que esconde alimañas dañinas …

Hay una sola isla frente a este país, que está fuertemente fortificada, llamada “Impunitas”, donde se refugian intermitentemente, al volver de sus incursiones fuera de Delinquentia, ciudadanos de este país, pagando altas sumas de dinero a los que llaman “bogas”, que al parecer “se las saben todas” y los protegen   –además de las fortificaciones de “Inmunitas”- con kilómetros de papel escrito y toneladas de documentos que actúan como murallas dilatorias, haciendo que los sucesos, fruto de las incursiones, se diluyan en el tiempo …

El clima es bastante malsano, pero a nadie le importa porque se han acostumbrado, ni preocupa lo que otros puedan sentir. Es el reino del “YO”, donde, en primer lugar, está el “YO”, en segundo “YO”, en el tercer lugar “YO” y si hay sitio adicional… el “YO”, ¡por supuesto! No se “hacen bolas” los Delincuentes, sean de “Criminalia, “Delinquentia” –la capital- o “Asesinia”, ya que cada cual va por su camino y se dedica a sus cosas, salvo cuando deciden unirse para operar juntos y forman lo que se llaman “organizaciones”, que tienen un orden jerárquico para asegurar el buen funcionamiento de la “empresa” …

Suele decirse que el país está rodeado por la llamada “Justitia”, que es un conglomerado bastante heterogéneo de fuerzas con nombres rimbombantes, y que hasta ahora no ha demostrado mayor actividad efectiva, salvo capturar a uno que otro Delincuente, sin mayores resultados ulteriores y tal vez por esta inacción es que los analistas dudan de su existencia …

“Delinquentia” sigue sin problemas mayores, porque interiormente, sus habitantes de “arreglan” entre ellos. El país tiene una bandera que ostenta en el centro, una mano en puño, con el dedo medio levantado y rayos detrás, sobre un círculo rojo. Su lema nacional es “Delinquentia hunida, nunca será bensida” …

Imagen: https://sp.depositphotos.com

«NO NECESITO VER LO QUE NO EXISTE»


Dicen que eso fue lo que le dijeron a Galileo Galilei, cuando les pidió que miraran las cuatro lunas de Júpiter, a través del telescopio que había inventado…

La estupidez humana, autosuficiente e ignorante, no es de ahora. No es una “secuela pandémica”, sino una triste y enferma realidad, que se remonta a siglos, diría que a miles de años …

El “caso Galileo” o “Il proceso a Galileo Galilei” empezó hacia 1610 y terminó con el juicio y condena por la Inquisición católica romana en 1633, a Galileo, por defender el heliocentrismo –que ya en 1616 había sido declarado “formalmente herético” por la misma Inquisición- un modelo astronómico en el que la Tierra y los planetas giran alrededor del sol, en el centro del Sistema Solar …

En Los libros referentes al heliocentrismo se prohibieron y Galileo Galilei fue condenado a abstenerse de enseñar o defender cualquier idea heliocéntrica …

La teoría imperante entonces, era que la Tierra era el centro y el Sol y los planetas giraban a su alrededor. Es el ser humano, creyendo que él era “ombligo del mundo” y su “casa”, la Tierra, “ombligo del universo” …

¡Cuánta agua ha corrido bajo los puentes, y el hombre aún cree ser el centro de los seres que pueblan la Tierra; muchos afirman que esta es plana y muchos defienden también que somos los únicos seres vivos e inteligentes del Universo…!

Ahora hay un telescopio –el James Webb- que nos está permitiendo ver lo que no veíamos y sin embargo existe. Inclusive aquello que existió hace miles de millones de años luz …

Galileo debe estar en su tumba, revolcándose de risa, abrazado a su telescopio…

Imagen: https://www.nasa.gov

IL SORPASSO


Es el título (en castellano “La Vida fácil”), de una famosa película italiana de 1962, que protagonizaran Vittorio Gassman, Jean-Louis Trintignant y Catherine Spaak; escrita por Ettore Scola, Ruggero Maccari y Dino Risi- que la dirigió- con música de Riz Ortolani, fue ganadora de múltiples premios y verdadera “película de culto” …

En la película, el auto convertible que aparece y es-curiosamente- una figura muy presente, tiene un “klaxon” o “bocina de aire” (con electro compresor) de tres trompetas y sonido característico, klaxon que se popularizaría y en Lima haría furor, poniéndose de moda …

Era un símbolo de modernidad, una especie de “yo tengo” que “hablaba” por el propietario del automóvil –generalmente joven-  que atronaba las calles de esta vetusta y sin embargo pizpireta Ciudad de los Reyes …

Épocas de “Puntos” de reunión -donde los jóvenes acudían en sus vehículos- como el “Bar B. Q.”, el “¡Oh Qué Bueno!”, el, el “Pío Pío” o “El Rancho” (este, tal vez más “familiar”), dejando en el olvido a los antes populares “CremRica”, eran escenarios de bullanga y sonoros “ilsorpassos” que anunciaban llegadas y partidas, con el rugido de motores acelerados …

Era épocas en las que el caos no se había apoderado todavía del tránsito en la ciudad, existían los tranvías y guardo gratos recuerdos de ellos y del “Expreso-Miraflores”, línea municipal de ómnibus, que unía el centro de Lima con el sur –llegando más allá de Miraflores, hasta Barranco, en el límite con Chorrillos; primero buses “Mercedes Benz”, azules, con el techo plateado y después “Büssing”, también alemanes, de colores crema y guinda …

Épocas de “rocanroleros”, de casacas de cuero, de los “Tabacos Negros” (un grupo joven –medio maloso- barranquino) y de los “Gatopardo” miraflorinos … Años más, años menos, los recuerdos, como siempre, se mezclan y se hacen un pequeño montón, con fechas poco claras, pero que viven en la memoria para arrancar sonrisas …

Imágenes:  https://rateyourmusic.com / http://www.colonnesonore.net

«PODRÍA SERVIR…»


Tal vez una cultura de “podrías”, de durables, de “talveces” o de esperanzas nimias. Quizá eso fue nuestra cultura; la que hace algún tiempo fue cambiando para dar paso a lo “desechable”, lo de “un solo uso”, lo banal, a lo que se vuelve viejo antes de dejar de ser nuevo …

Yo crecí guardando pomitos de vidrio, bien lavados, a los que les quitaba las etiquetas y que después podrían guardar tornillos, clavos, tuercas, arandelas o clips. No había que botar nada, porque todo era reusable y la caja de cartón, la de los zapatos que acababan de comprarme, podía ser útil para guardar esas chucherías mil, que un niño “colecciona” …

Éramos “guardacosas” y felices de almacenar en el ropero, álbumes de figuritas, pañuelos que nunca usábamos, “pero que podían servir” y esa camiseta descolorida a la que le teníamos “camote” … Y el cajón vacío de 48 latas de leche “Gloria”, ¿no se llenaba de juguetes que, pasado un tiempo, “descubríamos” y volvían a la vida compañera, la de esas tardes de invierno, oscuronas, grises y frías…?

Eran otros tiempos, otros intereses y una extraña manera de pensar en el mañana, a través de las cosas … Eran tiempos de los carritos de metal o madera, de los patines “Winchester” de fierro, las pelotas coloridas –e indestructibles- de jebe; eran tiempos de “las herencias” de sacos del hermano mayor, que el sastre acomodaba a tu tamaño …

Era el tiempo de “no perder nada” y ahora que lo descartable reina, me parece que sí perdimos mucho …

Imagen: https://es.123rf.com