
No puedo seguir escribiendo mientras un asesino ruso somete a Ucrania y al mundo entero a su hora más oscura.
Las imágenes horrendas que produce el ataque a la vida y el sonido ominoso de las explosiones, los gritos de miedo y de dolor, son lo único que el mundo ve y escucha…
No quiero seguir escribiendo.
Ya la edad nos ha sensibilizado mucho Manolo. Hasta hoy recordé que cuando bombardearon mi ciudad dejé de comer y hablar por muchos días.
No sé si es la edad… Salvo el terrorismo en el Perú nunca viví un conflicto armado directamente(nací al terminar la II guerra mundial) y aunque la guerra esté muy lejos, las imágenes de la destrucción que causaba Sendero Luminoso aquí y los asesinatos directos y con bombas que cometía… La sensación es la misma y me quita las palabras y lo nubla todo…
Entiendo. A todos nos duele lo que pasa en El planets.
Por desgracia, hay a quienes no les duele y en cambio, lucran con lo terrible que sucede en esta esfera giratoria… 😦 😦
En miles de años nuestro cerebro no superar Al de Las hormigas.
¿Cuál cerebro…? 😦 😦 😦