Primero fue asombro y luego se aterraron cuando el ser se dividió en dos y una parte caminó en dos patas, mientras que la otra seguía a la primera sobre cuatro.
La parte de arriba brillaba al sol tenía plumas y jalaba a la otra, caminando hacia donde el agua corría por entre los árboles.
De pronto aparecieron más, que emitían unos sonidos extraños como si conversaran, pero no se entendía nada; todos los demás seres se dividieron en dos y fueron hacia el agua.
De lejos, los observaban y enviaron a uno para que avisara porque los “nunca vistos” podían ser dioses o demonios.
Imagen: http://www.abc.es
manologo 
Debe estar conectado para enviar un comentario.