Toda la vida cedió sin quejarse.
No protestaba si lo empujaban, si le quitaban el sitio en la cola del cine o si le decían que ya se había terminado la oferta en el supermercado.
No preguntaba el porqué del alza de un precio y dejó pasar oportunidades que otros aprovecharon.
Generalmente se lo consideraba apático, indolente o bobo; incapaz de nada.
Cuando se pegó repentinamente un tiro, sorprendió a todos por su decisión.
Esta suicida el fin de semana.
y suele suceder lo vemos apático e indiferente cuando solo quiere un abrazo y una taza de te… me gusto …
en cuanto al escrito maestro lo supo manejar
Hay suicidas de domingo… 🙂
Nadie sabe lo de nadie…
¡Gracias por tu comentario; trato de que lo que escribo se «encarrile» lo más posible.
Abrazo. 🙂
me gusta tu estilo maestro… ah y corrígeme por favor ,eres maestro tienes vocación ;mejor no me corrijas enseñame
K sera?
¡Qué bueno que te guste el estilo!
Aparezco como «profe», porque así me dicen los que fueron mis alumnos (que son como 16,000). También me dicen «»maestro»…
Enseñé por30 años, publicidad, técnicas de creatividad, estrategia publicitaria, comunicación intercultural y comunicación de gobierno; lo hice en total en 9 universidades e institutos de enseñanza superior, aquí en Perú y en Bolivia (donde fui por 1 año, todos los meses, durante una semana cada mes).
Mi campo, como ves, es la comunicación, con especialidad en creatividad publicitaria.
Ya estoy retirado (desde el 2010) porque tres ACVs al cerebro y 4 infartos al corazón no son lo mejor para una condición óptima de enseñanza. Siempre he creído que al alumno se le debe respetar y dar el 100% y en mi caso, no puedo darlo, así que lo mejor es mirar los toros desde la barrera.
Más que «enseñar» puedo comentar y a veces lo hago…
Un abrazo y gracias por tu comentario.
Manolo. 🙂
Los hay.