A un niño de cinco años un adulto le rompe la nariz después de jalonearlo; un perro es apaleado por su dueño hasta dejarlo al borde de la muestre; una mujer es asesinada por su “pareja” en venganza celosa.
Hasta aquí un entresacar distraído de noticias que tienen en común la indefensión de las víctimas y la violencia prepotente y cobarde de los autores.
Cada día los medios difunden muchos casos como estos, que por lo general quedarán sin castigo, porque hay resquicios legales, fallas en el proceso o simplemente por la incompetencia de las autoridades.
Mientras tanto se abusa hasta la muerte de los débiles, se niega impunemente responsabilidad alguna y cuando se sentencia, el comportamiento posterior del criminal convierte a la pena en una vacación con comida incluida.
Si eres “el más fuerte” tus excusas se volverán razones y nada pasará.
Sin embargo, hay quienes por error se pudren en las cárceles; aquellos que pagan por ser libres y los abandonados, que sí, robaron un teléfono celular a la carrera y están encarcelados sin que nadie los juzgue, porque no tuvieron para pagar la coima que pedía el que los atrapó.
Esta es la realidad y contra ella hay que luchar, aunque la reiteración de noticias embrutezca, encalleciendo el pensar, el protestar y actuar.
Cuando alguien se atreve a denunciar es tildado de loco, de liero, de buscar figuración a como dé. Pero hay que alzar la voz, gritar que son coimeros, asesinos, abusadores, auténtica basura y que miran como si nada hicieran, para después reincidir, sabiendo que los fuertes siempre triunfan sobre el débil y que están protegidos por la indiferencia total que los rodea.
Exacto lamentablemente así es el poder del hombre sin comunión con nuestro Padre celestial, por el sólo echo de poseer y controlar la humanidad junto a su avaricia no le importa nada.
Oremos por las almas malignas encuentren luz divina, que la paz de nuestro Padre sea derramada entre nosotros.
Feliz y bendecido día junto a los seres amados.
Mil abrazos
¡BUEN DÍA! 🙂 🙂
Igual…!!! Lluvia de bendiciones para tu vida junto a los que amas en tu corazón.
Mil abrazos
Siempre el pescado grande se comió al más chico, y como dice Martín Fierro » Siempre es bueno tener palenque a donde rascarse».
Aunque nos duela, en menor a mayor medida, es como tú lo dices.
Hasta pronto.
Una primigenia ley de la selva…
Y después hablamos de ser «civilizados»
Nos vemos.
Bendita impunidad y se dan de gopes en el pecho los malosos.
Diría, maldita impunidad. Los golpes deberían destrozarles el pecho.